REQUISITOS DE INSTRUCCIÓN
Formación básica: Licenciatura en Psicología, que va a proporcionar un amplio conocimiento de los diversos instrumentos, fuentes de evaluación,  técnicas terapéuticas y de las diversas áreas de aplicación (Individuales, Grupales, y Comunitarias).

Es necesaria una formación complementaria en Intervención Psicológica en emergencias y catástrofes, de carácter teórico- práctico. Para la aplicación de la Psicología en el campo de las emergencias son necesarios conocimientos  desde distintos ámbitos  de su disciplina (Clínica, Social y Organizacional).

El ámbito Clínico, proporciona información sobre  las posibles reacciones de los afectados ante incidentes críticos  y sobre cómo  desarrollar  una intervención psicológica en situaciones de crisis. 

El ámbito de la Psicología Social  aporta  un conocimiento  del comportamiento colectivo en catástrofes y de la dinámica de los grupos en estas situaciones, así como las técnicas para cubrir las necesidades de información pública por parte de los afectados.

Y el Campo Organizacional proporciona información sobre cómo  asesorar  en las repercusiones psicosociales de la gestión de la emergencia: organización de equipos, comunicación intergrupal y coordinación, toma de decisiones, resolución de conflictos y gestión del estrés en estas situaciones.
También es necesaria una formación básica en materia de Protección Civil, para conocer el ámbito estructural y organizativo en el que van a desempeñar su labor.

Asimismo, se considera necesaria una formación básica en materia de Psicología Forense  para conocer los procedimientos judiciales en emergencias y catástrofes en los que los afectados se van a ver involucrados.

Cada institución diseñará sus propios procedimientos de selección, formación y supervisión de prácticas que, a su vez, serán requisitos necesarios de los psicólogos que integren  los dispositivos psicosociales de Emergencias y Catástrofes.

REQUISITOS APTITUDINALES, DE PERSONALIDAD Y HABILIDADES
- Habilidades  Sociales: empatía, capacidad de comprensión y  habilidad para la escucha.
- Equilibrio emocional, seguridad en sí mismo y capacidad de autocontrol. La intervención en una situación de desastre puede contener un alto grado de tensión emocional, que el psicólogo debe conocer y manejar de forma adecuada.
- Resistencia a la fatiga física y psicológica.
- Capacidad de adaptación y flexibilidad. La emergencia o desastre puede suponer un desafío en cuanto a la utilización de recursos profesionales y personales, dada la complejidad y adversidad que puede caracterizar la situación.
- Capacidad y disposición para trabajar en equipo y cooperar con otros profesionales: la situación requerirá que el psicólogo se integre en un sistema organizado de gestión de la emergencia, colaborando según las necesidades reales y no exclusivamente desde su forma de hacer habitual.
- Tolerancia a la frustración.
- Capacidad de Evaluación y Planificación.
- Capacidad de toma de decisiones en situaciones de alto estrés.
- Disciplina.

REQUISITOS PROFESIONALES
Experiencia profesional relacionada con los siguientes ámbitos:

- Intervención psicosocial en emergencias o/y desastres.
- Intervención en crisis.
- Intervención Estratégica: Toma de Decisiones, Manejo de Grupos.

RESPONSABILIDADES
- Asegurar la ejecución de las órdenes y disposiciones del coordinador del Grupo de Intervención Psicosocial.
- Confidencialidad y respeto  (gestión de la emergencia e intereses de los afectados).
- Asumir su participación en una organización de emergencia.
- Respetar el código deontológico del psicólogo.

CARACTERÍSTICAS LABORALES
Disponibilidad total, cumpliendo servicios de guardias localizadas y pudiendo ser requerido ante cualquier emergencia o desastre.

Los escenarios de trabajo son lugares donde se dan situaciones de alto impacto emocional, sobre todo en situaciones de elevado número de muertos, si las víctimas son niños, si existen elementos de identificación entre las víctimas y los intervinientes, etc.

Se dan intervenciones con un elevado número de horas de trabajo y en situaciones ambientales extremas (alta probabilidad de que el riesgo se haga patente, etc.). De ahí la necesidad de una formación y entrenamiento adecuados.

Deben tenerse en cuenta, todos estos aspectos y poner en marcha medidas de autoprotección para los propios psicólogos, que evitarán la aparición de algunas secuelas posteriores.